• Aumenta la autoestima: Cuando los estudiantes son reconocidos en su desempeño escolar, por mínimo que sea, aumenta su autoestima y confianza en sí mismos, lo que a su vez puede motivarlos a continuar aprendiendo y a perseguir sus metas académicas.
• Fomenta la curiosidad: Sentirse motivados ante un tema o actividad puede fomentar la curiosidad y el deseo de aprender más sobre un tema en particular, lo que puede llevar a una exploración más profunda y una comprensión más completa.
• Ayuda a superar los desafíos: Los estudiantes motivados son más propensos a enfrentar los desafíos y superar los obstáculos en el aprendizaje, en lugar de rendirse o sentirse abrumados.

En resumen, la motivación es esencial en el salón de clases ya que puede influir en el rendimiento académico, la participación en clase, la autoestima, la curiosidad y la capacidad para superar desafíos. Los maestros pueden fomentar la motivación en los estudiantes a través de técnicas de enseñanza que se centran en la relevancia, el interés y la conexión con la vida real de los estudiantes, así como en la retroalimentación y el reconocimiento del éxito.

En mi Academia para Psicólogos nos ocupamos de ambientes de aprendizaje positivo y de apoyo que alienten a los estudiantes a alcanzar su máximo potencial a través de la educación emocional.

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